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¿Qué es el despido justificado según la ley federal del trabajo?

A través de la definición clara de lo que constituye un despido justificado, la ley no solo protege los derechos laborales de los trabajadores, sino de los patrones. 

Dentro del mundo laboral en México, la distinción entre despido justificado y despido injustificado puede considerarse como un aspecto fundamental en la relación laboral entre empleadores y empleados.

Este delineamiento no solo protege de los derechos de los trabajadores, sino que también otorga a los empleadores la capacidad de gestionar su fuerza laboral de manera eficiente, siempre dentro del marco legal establecido por la ley federal del trabajo (LFT).

Esta mencionada norma laboral no solo regula las condiciones bajo las cuales se pueden terminar los contratos de trabajo, sino que también establece un equilibrio justo y necesario entre las partes involucradas, buscado con ello garantizar la armonía en el ámbito laboral.

¿Qué es el despido justificado según la LFT?

Según la ley Federal del Trabajo, el despido justificado se fundamenta en incumplimientos o faltas graves por parte del empleado, que están meticulosamente enumeradas en su artículo 47.

Estas disposiciones permiten a los empleadores finalizar la relación laboral sin la obligación de indemnizar al trabajador, limitándose al pago del finiquito.

El Artículo 47 establece motivos para terminar el empleo sin responsabilidad para el empleador, incluyendo algunos de las siguientes causales: 

  • Engaño por parte del empleado con certificados falsos. 
  • Comportamientos indebidos con faltas de probidad.
  • Violencia, daños materiales intencionales o por negligencia.
  • Comprometer la seguridad.
  • Actos inmorales.
  • Revelación de secretos empresariales.
  • Inasistencias injustificadas.
  • Desobediencia.
  • Negativa a seguir medidas de seguridad.
  • Trabajar bajo influencia de sustancias.
  • Condenas penales que impidan el trabajo.
  • Falta de documentos necesarios, entre otras. 

Un ejemplo de este tipo de despidos antes citados, ocurre cuando un empleado, al ser contratado, proporciona información falsa sobre su formación profesional o experiencias laborales anteriores.

La ley ampara el despido sin responsabilidad para el patrón, siempre y cuando este pueda demostrar el engaño y su impacto directo en la decisión de contratación.

Diferencia entre despido justificado e injustificado:

La principal diferencia entre el despido justificado y el injustificado radica en la existencia de causas legítimas y comprobables para la rescisión del contrato.

En casos de despido injustificado, donde el empleador termina la relación laboral sin sustentar su decisión en alguna de las causas previstas por la ley, el trabajador tiene derecho a ser indemnizado conforme a lo establecido en la legislación.

Causas adicionales de despido justificado: 

Como enlistamos más arriba, la Ley Federal de Trabajo detalla una serie de motivos adicionales por lo cuales un despido puede ser considerado justificado, tales con faltas de honradez, actos de violencia, daños intencionales a la propiedad de la empresa, negligencia grave, entre otros.

Estos criterios tienen el objetivo de proteger los intereses de la empresa y garantizar un ambiente laboral seguro y respetuoso para todos los empleados.

Para proceder con un despido justificado, los empleadores deben seguir un protocolo específico que incluye la entrega de un aviso por escrito al trabajado, en el que se detallen las razones del despido y las evidencias que lo sustentan.

Este proceso promueve la claridad y la transparencia en la gestión de los despidos, facilitando a ambas partes un entendimiento claro de las circunstancias que envuelven la terminación del contrato.

La Ley Federal del Trabajo, mediante la estipulación de estos procedimientos y criterios, subraya la importancia de la transparencia, la equidad y el respeto mutuo en las relaciones laborales.

Definiendo de manera clara lo que constituye un despido justificado, la ley no solo salvaguarda los derechos laborales de los trabajadores, sino que también brinda a los empleadores un marco legal sólido para manejar de forma adecuada las situaciones que ameriten la rescisión de la relación laboral. 

Este equilibrio es esencial para preservar la integridad y la justicia en el ámbito laboral de México, contribuyendo en un entorno de trabajo más justo y equitativo para todos. 

Fuente: debate.com.mx